lunes, 17 de junio de 2013

No. No. Vos tampoco. NO. No, gracias. No, paso.

Si no te hace reír, no sirve.
Si no se preocupa por cómo llegaste a tu casa después de verse, no sirve.
Si sólo te habla para saber si salís, no sirve.
Si te dice que tu perro es feo, no sirve.
Si no te sentís "en casa" entre sus brazos, no sirve.
Si no cerras los ojos cuando te abraza o te da un beso, no sirve.
Si no sentís la necesidad de abrazarla o abrazarlo por diez horas seguidas, no sirve.
Si te pone de mal humor, no sirve.
Si pensás en alguien más cuando estás con esa persona, no sirve.
Si no cierra sola la herida, no sirve.
Si buscás a alguien igual, no sirve.
Si no querés a esa persona, no sirve.
Si no la extrañás, no sirve.
Si piensa sólo en él o ella, no sirve.
Si lo único en lo que piensa es en tener relaciones, no sirve.
Si le das vergüenza, no sirve.
Si estás con esa persona para tapar un agujero, demostrarle a alguien que sos mejor que él, o simplemente porque no te gusta estar solo, no sirve.
Si estás con él o ella porque tiene plata, no sirve.
Si no se cruza el mundo para verte aunque sea diez minutos, no sirve.
Si no soñás con esa persona, no sirve.
Si sólo te quiere o lo querés para estar un rato, o por aburrimiento, no sirve.
SI NO SOS FELIZ, NO SIRVE.