martes, 8 de mayo de 2012

Cuando veas caer mi espalda...

Sólo deseo una cosa, y con lo más profundo de mi alma, espero que no vuelva a ser todo como antes: tan vacío, tan frío, tan roto, tan feo, tan inútil, tan triste. Lo único que me sale es desconectarme de mí misma, no sentir nada, ignorar cualquier palabra, cualquier grito, cualquier ruido, porque si lo pensara dos minutos me va a doler mucho, muchísimo.
Siempre con la misma cantaleta: "me voy para no volver, tengo listo el equipaje"
llenas y vacías la maleta ¿cómo puedes pretender que me coma ese chantaje?.